Energía Solar
La definición de energía solar señala que ésta es un tipo de energía renovable y confiable; renovable quiere decir “inagotable”. La característica principal de la energía solar es justamente este adjetivo, el poder ser utilizada una y otra vez sin temer a que se agote; la definición de energía solar afirma que la misma puede ser obtenida a través de un “combustible de libre acceso”: la radiación solar.
La utilización de este tipo de energía contribuye a mejorar la calidad de vida sin interferir con nuestro clima; obtenemos electricidad para alimentar los sistemas de calefacción como los de refrigeración, los sistemas de comunicaciones, etc. Aunque nos cueste creerlos, aún existen más de dos mil millones de personas que no cuenta con ningún tipo de energía en todo el mundo, esto convierte a las fuentes de energía renovables en una alternativa óptima para solucionar los problema de carencia energética.
Conceptos fundamentales sobre este tipo de energía.
La definición de energía sola señala que la energía irradiada por el astro rey no es sólo renovable sino que limpia y extremadamente abundante; la cantidad que recibe la tierra en 30 minutos es equivalente a toda la energía eléctrica que los hombres consumimos en un año. Sin lugar a dudas, el aprovechamiento de este recurso es inminente y necesario; para llevar a cabo esta tarea se han construido distintos captadores solares conocidos como paneles solares, módulos solares, o paneles fotovoltaicos.
Estos sistemas están expandiéndose por toda Europa, aunque, actualmente, no sea un fenómeno muy difundido; una instalación fotovoltaica es simple, silenciosa, de larga duración y requiere de un muy bajo mantenimiento.
A estas ventajas agregamos su confiabilidad y su nula contaminación al medio ambiente; estos sistemas cuentan con el valor añadido de generar puestos de trabajo empleando los recursos locales sin depender de un recurso “agotable”. Una de las mayores trabas que existe actualmente para difundir el uso de este tipo de energía se relaciona con los costos; fabricar un panel solar o captador tiene un costo muy alto y por eso los estados de diferentes naciones europeas están otorgando subvenciones para facilitar la producción de los módulos. Otro inconveniente es la posición o ubicación con respecto al sol, España, por ejemplo, se ha visto beneficiada ya que recibe una considerable carga de energía solar por día, mientras que Inglaterra y Alemania, poseen muy pocos días soleados.
De acuerdo a la definición de energía solar, la misma se puede aprovechar activamente para producir energía térmica o fotovoltaica; el primer tipo de energía se emplea principalmente para calentar agua o para abastecer los sistemas de calefacción. Los colocutores solares son los encargados de calentar el agua tanto de los radiadores como el agua que se consume en el suministro de un hogar. La energía fotovoltaica es la más popular de todas, ya que la producción de los paneles de este estilo ha aumentado en los últimos años un 20%; en algunas ciudades los sistemas de alumbrado son de esta índole, éstos suministran una corriente alterna y vuelca los excedentes a la red pública. La energía solar también involucra a los electrodomésticos, en especial al ya conocido “horno solar”; estos son importantes concentradores de alta temperatura; el más grande de todos está situado en Odrillo, en la región francesa de los Pirineos y cuenta con casi 10.000 reflectores y una superficie total de 1,900 metros cuadrados. Este tipo de horno se diferencia del convencional ya que se emplean para llevar a cabo investigaciones de materiales que requieren altas temperaturas en entornos libres de contaminación, dichos artefactos alcanzan temperaturas de hasta 4,000 ºC; por otro lado están aquellos que se emplean para cocinar comidas manteniendo todas sus vitaminas y sin riesgo de incendios.
Energía Solar en España